Augusta Dogville

Ahora que Vera tenía pruebas, de que en realidad era Jack quién había impuesto sus sentimientos a Grace se volvió más Cruel que nunca con ella,

No fue el orgullo lo que mantuvo en pie a Grace cuando el otoño llego y los árboles fueron perdiendo sus hojas, sino un estado parecido al trance que se apodera de los animales cuya vida corre peligro, un estado en el que el cuerpo reacciona mecanicamente,con lentitud, sin expresar demasiado dolor, como un paciente que permite pasivo que su enfermedad se apodere de él.

si Grace tenía amigos en Dogville, desaparecieron como las hojas.

sin motivo alguno

sin motivo alguno se me dibuja una sonrisa,
a pesar de todo, tengo ganas de reir.
creo que me brillan hasta los ojos, y suelto una carcajada de estas que se contagian.

Aves de paso Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina

Dedicado a todas mis aves de paso, que en un poema anterior, no nombre, porque no me acordé o simplemente porque no quise.
Dedicado a las personas que con gusto fuí su ave de paso.

formas de querer

a Darío fraternalmente
a Sofía procurando su bien a pesar del mio.
a Enrique de una forma perenne sin restricciones,una agri-dulce condena.
a Ana más que a mi misma, puro y desinteresado
a Jon con adoración, respeto y bondad que me devuelven sus ojos
a Nacho inocentemente, con alborozo, tiernamente
a Nuria como a una promesa, con confianza y seguridad
a Giovana con equidad y firmeza
a Alba de muchas maneras,idílica, de una forma poética. como Amelie
a Mu un vínculo nos une, y adivinamos nuestro sentir.
a Merche, callando, obviando, tragando, aceptando que estas al lado de la equivocación.
a Castillo en muchos sentidos, quizá erróneamente pero inevitablemente
a Elvira dulcemente
a mi hermano orgánicamente e irracionalmente
a mi hermana desesperadamente
a mi madre desfallecidamente
a mi padre dolientemente
a mi familia paterna urgentemente
a mi familia materna atormentadamente
a Bruno con expectacion, con muchas ganas, con instinto, instruyéndonos
a mí misma flamantemente

tantas formas caben en mi pecho, y casi siempre equívoca e insatisfecha, no resuelta, no explicita, se acumula, quema, decepciona, contrariados os pienso, vehemente me encuentro, sensual me piensan y soy sin remedio.

A mi también me atribuyen cosas en internet

Entrevista a Galeano
¿Cómo vive este momento de revolución comunicacional, impacta en su producción literaria?
– Si hablamos de internet, soy muy prehistórico, y tuve una gran desconfianza a ese sistema durante mucho tiempo. Tenía razones, internet nació de una necesidad militar del Pentágono, para operaciones militares, con fines de muerte. Pero con el tiempo se transformó en otra cosa. Ahora en internet suenan muchas voces que vale la pena escuchar, multiplicidad de voces. Se ha vuelto una novedad tecnológica muy positiva. De todos modos, hay que ser cuidadoso, porque internet está alfombrada de cáscaras de banana.

– ¿Y cómo es eso?
– Por ejemplo, mi trabajo más felicitado, más laureado, que circula por internet no me pertenece y desconozco quién me lo atribuyó. Se llama “Por qué no tengo DVD”, que además no es cierto, porque yo sí tengo DVD. Pero ocurren cosas desopilantes cuando algunas personas maravilladas con ese texto me felicitan. A mí me da cierto pudor incluso defraudarlas y suelo no aclararles nada (risas). Pero no soy el único, le ocurre a muchos autores, como a Gabriel García Márquez, quien tiene un testamento circulando por internet que no es de él. Y, según dijo, cada vez que lo lee le dan ganas de morirse.

– De todos modos, adoptó internet para trabajar y comunicarse.
– Sí, claro, pero no me confundo, una cosa es el violín y otra la mano que lo ejecuta. Creo en las palabras que nacen de la necesidad de decir. Yo busco leer y escuchar las palabras auténticas, verdaderas, que valgan la pena. El medio me importa poco. Por ejemplo, soy un gran lector de paredes y las paredes están ahí desde el principio de los tiempos, cuando todavía no eran paredes y eran sólo rocas como las del río Pinturas, en Santa Cruz. Esas manos impresas allí son una palabra muy fuerte de esos hombres o mujeres que imprimieron sus manos en una época anterior a todas las épocas (Nota: las manos impresas tienen una antigüedad promedio de 10 mil años). Esas manos dicen: “Nosotros estuvimos aquí”.

llueve

Hoy llueve, y se despiertan aromas del ayer.

Avellaneda.

Je suis une poupée

Una niña juega con dos muñecas y les regaña para que se queden quietas.
Ella también parece una muñeca, por lo linda y buena que es y porque a nadie molesta.



Del libro Adelante de J.H Figueira

De Cesare para mi

por alguna razón, el mundo te necesita Tania.

Cesare.